Reforma universitaria | Mercedes del Hoyo: "La rentabilidad económica no puede ser el objetivo de la universidad"

Mercedes del Hoyo

Marta Yébenes | Fuenlabrada.- La directora del departamento de Ciencias de la Comunicación II de la Universidad Rey Juan Carlos, Mercedes del Hoyo, se muestra crítica con el informe de la comisión de expertos para la reforma universitaria impulsada por el ministro José Ignacio Wert, una propuesta que, según advierte, ni resuelve las carencias ni conserva los elementos positivos actuales. Del Hoyo, que sostiene que actualmente "no hay una democracia real" en la universidad, demanda que el objetivo de una nueva ley sea conseguir esa libertad, algo a lo que, a su juicio, no contribuye la iniciativa ministerial. De hecho, la profesora, que alerta de que puede producirse un deterioro de la enseñanza, considera "lamentables" algunas medidas como la entrada de las comunidades autónomas en el consejo de gobierno de la universidad.

Pregunta. ¿Cómo valora el informe sobre la reforma?
Respuesta. La impresión que me da es que no soluciona los problemas más graves que tiene la universidad. Desprecia lo que tenía de bueno la situación actual, y las medidas que propone sobre el profesorado y sobre las competencias del rector me parecen contraproducentes. Con esto lo único que van a hacer es deteriorar la enseñanza que se imparte, puesto, que no parece que estas disposiciones estén relacionadas con ella.

P. ¿Cree que mejorará la situación si el rector elige los cargos de la universidad?
R. Creo que la falta de libertad no repercute en una mejora. Que determinados cargos de la universidad vayan a ser de designación y no de elección, como era hasta ahora, no va a significar que quien desempeñe el puesto lo haga mejor, al contrario. Ahora los cargos se eligen pero no con toda la libertad que el papel dice que se deberían elegir. No hay una democracia real, aunque la haya sobre el papel y tratar de conseguir esa democracia tendría que ser el objetivo de un ley nueva.

P. ¿Cómo valora la entrada de las comunidades autónomas en el consejo de la universidad?
R. Es una injerencia política dentro del gobierno de la universidad. Me parece que es acabar con una tradición que ha costado muchos años, esto acaba con la independencia de la universidad. La verdad es que en un momento en el que los cargos políticos demuestran tener tan poca talla, que amplíen su radio de acción hasta ejercer una acción directa sobre esta institución me parece lamentable.

P. ¿Qué opina sobre la fusión o desaparición de grados por falta de estudiantes o que estos tengan tiempo de permanencia dentro de la universidad?
R. Me parece que atenta contra la libertad individual y contra el verdadero sentido de la universidad. Una cosa es que la universidad tenga que estar más en contacto con lo que la sociedad necesita, y que efectivamente sea capaz de sacar a la calle profesionales que cumplan las expectativas y las necesidades que tiene, y otra cosa distinta es que se olvide del otro papel que tiene la universidad y que es formar a la gente que quiere formarse en lo que quiere estudiar. El hecho de que un grado tenga 10 personas no me parece una razón suficiente para eliminarlo. La rentabilidad económica no puede ser el objetivo prioritario de la universidad como no lo es de otro tipo de instituciones que hay en la vida pública.